Un instructor debe desarrollar las habilidades de sus alumnas, notar sus inclinaciones y actuar en esa dirección. Y esta doncella era la que mejor tocaba la flauta de cuero. Esta habilidad la beneficiará mucho, no sólo en sus estudios, sino también en la vida cotidiana. Lo principal son los ensayos diarios y en diferentes flautas.
Lástima que sólo ocurra en un cuento de hadas. Me encantaría participar como invitado y ayudar económicamente. Bueno, eso es sólo un sueño.